viernes, 28 de septiembre de 2012
ESCRACHES, AQUÍ Y ALLÁ.
Si nos parece que vivir en democracia está muy bien, hay que decir que una de las peores calamidades de la conducta social son los escraches. Conducta anti-social, si las hay. Le toque a quien le toque.
Ahora bien, el Gobierno Nacional está promoviendo una denuncia penal contra ese grupo que antes de ayer se estuvo manifestando en el frente de la casa de Moreno. Cosa que no veo mal, si soy coherente con lo que dije antes.
Pero mi pregunta es: ¿qué pasó con los afiches pegados en montones de lugares de la vía pública en contra de periodistas críticos al gobierno? Esos afiches eran anónimos pero se sabe quién los pagó.
¿Qué pasó con aquella celebración del Día de la Memoria, con niños llevados de la manito e invitándolos alegremente a escupir fotos de periodistas no afines al gobierno?
¿Qué pasó con los "juicios populares" de Hebe de Bonafini en Plaza de Mayo, a toda gente que según su criterio colaboró con el régimen militar de los 70s? (Curioso, y contradictorio, el gobierno que ella banca a muerte está compuesto por varios ex montoneros y periodistas que apoyaron el golpe de 1976)
No hay ningún fiscal interesado en investigar estos escraches, parece. Raro, ¿no?
viernes, 14 de septiembre de 2012
CACEROLAS NON STOP.
Reflexionando un poquito sobre lo de anoche.
Si alguien me preguntara qué pregunta importante tendría yo para hacer, yo preguntaría: "¿falta mucho para que la Argentina se cure de dosmilunitis?". La gente, y es entendible porque tiene dos mil y un problemas, por lo visto todavía no se entera de que el país en que vive nunca logró superar el trauma de 2001. Una muy relativa sensación de que el bolsillo o la billetera se han recuperado desde ese entonces, no ha provocado ningún cambio de fondo. Y el fondo es la política, actividad tan venida a menos en estos años, que anoche hasta se escuchó otra vez un "que se vayan todos". Pregunto: ¿que se vayan todos y venga un tirano?
Vuelvo sobre la política. La política, como actividad de servicio a la comunidad, hoy prácticamente es nula. Como digo siempre, está en terapia intensiva desde 2001 y de allí no sale todavía. En esto tiene muchísimo que ver el kirchnerismo, pero también la oposición se debería hacer cargo de sus infantiladas, como "mi límite es fulano o sutana". A la mierda con eso. Pónganse a laburar porque si no, pareciera que se metieron en política para hacer cualquier pelotudez y que los demás te aplaudan incondicionalmente por cadena nacional, como una que yo conozco. Por eso digo que la política, a diferencia de la economía que por un lógico rebote en el suelo sí lo hizo (mal que mal), no volvió, y no veo aún que haya un conjunto grande de políticos interesados en que vuelva. Apetencias personales, dicen varios por allí. La política está destruída, ese espacio está hoy vacío y se sabe muy bien que lugar que el bueno no ocupa, por lo general lo ocupa el malo.
Se habla mucho y mal sobre la oposición, y razón seguramente no le falta a la gente. Hay opositores buenos y malos, pero no hay una oposición articulada. Y así no va. Así seguirá yendo más de lo mismo. Muchachos, si nueve años no nos alcanzaron, ni doce, podemos comprarnos una manera de manejar el poder por cuatro años más que sólo le servirá al poder para seguir acumulando más poder, dinero nuestro y más años de permanencia. Y no mucho más que eso, que ya es casi todo, por otra parte. Gobiernos como el que tenemos que son, 100 % de abuso de poder y 0% de gestión. Y nosotros, seguiremos esperando ese colectivo de las 2 de la mañana que nunca llega.
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GOBIERNO NACIONAL,
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